El fracaso de la universidad española
Los motivos por los cuales una universidad española jamás destacará en los rankings mundiales de calidad universitaria son varios: desde la tremenda corrupción y clientelismo que impera en ellas, hasta el escandaloso bajo rendimiento intelectual del profesorado, pasando por su política de fomento y selección de un alumnado basada exclusivamente en criterios de ignorancia y servilismo.
Entre los distintos medios por los cuales un profesor universitario se perpetúa en su puesto y se garantiza la adulación de gente todavía más mediocre que él, destaca la dirección de tesis doctorales. En efecto, no hay método más eficaz para aumentar su precaria autoestima y, sobre todo, su cuenta bancaria, que tener encadenado durante un mínimo de 5 años a un estudiante (y más todavía si éste recibe una beca) mientras se finge la tutela de un trabajo de investigación que, como es bien sabido, nadie se va a leer, pero de cuyos frutos él sabrá sacar su debido rendimiento.[1]
Un ejemplo paradigmático de este fomento de la mediocridad en el sistema universitario español nos lo ofrece el ahora conocido como “doctor europeo” Paolo Stellino, quien en el año 2010 presentó su tesis doctoral, titulada Nietzsche y Dostoievski: psicología, resentimiento y moral [2] en el Departamento de Filosofía del Derecho, Moral y Política de la Facultad de Filosofía y Ciencias de la Educación de la Universidad de Valencia. Este trabajo estuvo dirigido por Jesús Conill y Juan Carlos Siurana, estando en el tribunal como presidente Adela Cortina, secretario Luis Enrique de Santiago y vocales Diego Sánchez Meca, Giuliano Campioni y Joan B. Llinares.
Aquí no vamos a entrar en aspectos formales relacionados con la lengua. Que en un texto académico como una tesis doctoral se pueda hallar un número tan elevado de errores sintácticos, gramaticales, ortográficos y de vocabulario responde tanto al completo desprecio e ignorancia del joven italiano del español, como a la permisibilidad e incompetencia de sus directores de tesis. Sólo así se explica:
- Pág. 29, nota 22: “…a la búsqueda de una nueva sistemación.”
- Pág. 31: “Como se nota, Nietzsche logró descubrir...”
- Pág. 36: “…mientras que el descubrimiento nietzscheano de Dostoievski ha de colocarse en el invierno 1886/87”.
- Pág. 39: “[…] como una referencia a la novela de Bourget y, de consecuencia,…”
- Pág. 45, nota 97: “Brenne subraya el contrasto presente en la obra…”
- Pág. 46: “del que, dicho sea de paso, el filósofo alemán trae numerosas sugerencias para su análisis del fenómeno de la décadence”.
- Pág. 51: “Nietzsche propone dar la vuelta por completo a la valoración tradicional del criminal…”
- Pág. 79, nota 235: “La novela Los demonios trae su origen de una noticia de crónica”. Y líneas más abajo: “Tras el asesinado, Nechaev huyó a Suiza…”
- Pág. 82: “En el párrafo 16 de El Anticristo, Nietzsche exprime básicamente el mismo razonamiento de Shátov…”
- Pág. 92, nota 6: “Dicho ensayo ha sido traducido de recién al castellano”.
- Pág. 93: “…a cuyo análisis viene dedica casi la mayor parte…”
- Pág. 136, nota 147: “…una traducción además muy libre y falta de importantes trozos del original ruso…”
- Pág. 212: “Podríamos seguir un largo rato con la presentación…”
Y nosotros también, la verdad. Mas dejemos aquí de momento estos casos como botón de muestra y olvidemos las innumerables oraciones pasivas, completamente incorrectas en español, la omisión casi sistemática de tildes, giros sintácticos incomprensibles y un largo, larguísimo etcétera.
Vayamos ahora al contenido. Aquí encontramos:
Bibliografía
En la “Introducción” se indica que las bibliotecas que el autor ha visitado “con más provecho” para la realización de su tesis doctoral han sido “las de Weimar (Nietzsche-Sammlungen, Herzogin Anna Amalia Bibliothek), Berlín (Staatsbibliothek y ZwB Philosophie, Humboldt-Universität), París (Bibliothèque nationale), Oxford (Taylorian y Bodleian), San Petersburgo (Российская Национальная Библиотека) y Roma (La Sapienza)” (pág. 15).
Sin especificar en ningún momento qué podía haber de relevante para la investigación aquí presentada sobre Nietzsche y Dostoievski en las dos bibliotecas mencionadas de Oxford, llama la atención:
- Que en toda la tesis se ignore la edición rusa de las obras de Dostoievski, ofreciendo en su lugar traducciones españolas (pág. 10).
- Que en ningún lugar se diga de dónde proceden las escasas palabras que se citan en ruso.
- Que sólo en la página 249 se mencione la edición crítica de las obras completas de Dostoievski en ruso, que además cita mal, pues leemos:
“Dostoievski F. M., Polnoe sobranie sochineni v 30 tomaj, Nauka, Leningrado, 1972-1988.”
Cuando lo correcto sería: Polnoe sobranie sochinenii v 30-ti tomach. Akademia Nauk SSSR / Institut Russkoi Literatury (Pushkinski Dom), Nauka, Leningrado, 1972-1990.
- Que a la hora de citar la correspondencia de Dostoievski, lo haga en traducción francesa. Y aquí no vale la excusa de que “se hace referencia a las mismas ediciones manejadas por el filósofo” (pág. 10), puesto que Nietzsche no tuvo acceso al epistolario de Dostoievski. ¿Acaso éste no se hallaba en la Biblioteca de San Petersburgo? ¿Tampoco en la de Berlín, París u Oxford?
- La misma pregunta se puede hacer el lector con la bibliografía rusa, pues:
- Merezhkovski es citado en traducción italiana (pág. 93, nota 10). Aunque luego, en la página 96, se afirma: “En suma, el estudio de Merezhkovski es una obra fascinante, compuesta en un estilo literario que, no obstante la extensión, facilita su fruición” (sic!). Dejando de lado que parece que le moleste al autor la “extensión” de la obra de Merezhkovski, ¿con este comentario sobre el estilo literario se está refiriendo a Merezhkovski o a su traductor italiano?
- Chestov (sic!; pág. 97) y Berdiaev (pág. 100) son citados en traducción española.
- En la página 159 se cita El principio antropológico en la filosofía de Chernyshevski a través de bibliografía secundaria, en esta ocasión, de Joseph Frank, quien constituye (al menos el autor no lo esconde) la base de su interpretación.
- Lo mismo sucede con la bibliografía alemana:
- Lukács se cita en traducción italiana (pág. 258).
- La obra de Heidegger sobre Nietzsche se cita primero en alemán (pág. 211, nota 98), para ser mencionado en el apartado de Bibliografía, donde se recogen “los textos realmente leídos por el autor” (pág. 249), en italiano (pág. 257).
- Se cita el artículo de Martin Dibelius a través de un estudio de Andreas Urs Sommer (pág. 71, nota 205).
- En la página 33, nota 38, se lee: “M. von Salis-Marschlins, Philosoph und Edelmensch: Ein Beitrag zur Charakteristik Friedrich Nietzsches, Naumann, Leipzig, 1897, p. 40-59, recogido en S. L. Gilman (ed.), Begegnungen mit Nietzsche, Bouvier, Bonn, 1981, p. 581.”
La referencia correcta es: Meta von Salis-Marschlins, Philosoph und Edelmensch. Ein Beitrag zur Charakteristik Friedrich Nietzsche’s, Naumann, Leipzig, 1897, pág. 50-51.
Asimismo, se copia la numeración ofrecida por Gilman (“p. 40-59”), sin reparar que ésta corresponde a las páginas que del texto de Meta von Salis Gilman reproduce en su antología y no a la citación que Stellino realiza.
- Existe una tremenda confusión a la hora de citar obras:
- Der Wanderer und sein Schatten se cita como El paseante y su sombra (pág. 9) y El viajero y su sombra (págs. 53 y 207). ¿En qué quedamos? ¿Wanderer se traduce al español como “paseante” o como “viajero”?
- Se cita la obra de Dostoievski como Memorias de la casa muerta (pág. 10; cfr. también págs. 97 y 116) y Memorias de una casa muerta (págs. 27, 32, 49 y 122). Sobre ello, ya se habló en otra ocasión.
- La novela breve Хозяйка es citada en una misma página como La patrona y La posadera (pág. 29).
- La obra de Berdiaev sobre Dostoievski se cita como El credo de Dostoievski (pág. 93) y El espíritu de Dostoyevski (pág. 100).
- La revista Revue des deux Mondes es citada como Revue de deux mondes en diversas ocasiones (págs. 11, nota 2; 17, nota 2; 38, 39, 49 y 66). En la página 49, nota 120 se encuentra mencionada de las dos formas.
- La revista Russki vestnik es citada como Russkij Vestnik (pág. 75) y Russki Vestnik (pág. 191).
- El título del texto de Resa von Schirnhofer se ofrece de dos maneras distintas: “Vom Menschen Nietzsche” (pág. 59) y “Von Menschen Nietzsche” (pág. 60).
- Otros errores a la hora de hacer menciones bibliográficas:
- En la página 34 se afirma “[…] que el escritor, editor y crítico Joseph Viktor Widmann había publicado en el mes de septiembre de 1886 en la revista Bund”.
Como ya se indicó en otro lugar, el diario suizo en el que apareció la reseña crítica de J. V. Widmann sobre Jenseits von Gut und Böse no es Bund, sino Der Bund. Asimismo, Der Bund no es una “revista”, sino un diario (Tageszeitung).
- En la página 38, nota 64 escribe: “P. Bourget, Nouveaux essais de psychologie contemporaine, Lemerre, París, 1885”.
En la obra publicada por Giuliano Campioni, presente por lo demás en el Tribunal, Nietzsches persönliche Bibliothek, el autor habría podido ver la referencia correcta en la página 148 e incluso en la 150 el facsímil de la portada, donde se lee claramente la fecha (1886).
Para concluir, añádanse las erratas que se pueden encontrar en la Bibliografía al final de la tesis (en especial, en la página 259), así como el hecho de que no se cita ni una sola obra de bibliografía secundaría en ruso y cómo todas las obras de autores rusos mencionadas durante el estudio y en la bibliografía son en traducción italiana, la lengua materna del autor (cfr. pág. 260).
Menciones de nombres propios
En este apartado mencionar que:
- El nombre de Eugène-Melchior de Vogüé aparece tanto sin guión (págs. 11, 17, 38, 39, 49, 50, 62, 71, 72 y 192) como con él (págs. 38, 49 y 251). ¿En qué quedamos?
- Emily Fynn aparece citada de manera sistemática en todo el texto como “Finn”.
- En la página 136 se escribe “Malwida von Meysebug”, cuando correcto es Malwida von Meysenbug.
- El nombre de la amiga rusa de Nietzsche se escribe de tres formas diferentes: Lou Salomé, Lou Andreas-Salomé o Lou von Salomé. ¿En qué quedamos?
- En dos ocasiones se escribe “Rodhe” (cfr. pág. 43, nota 92 y pág. 45, nota 97), cuando la forma correcta es Rohde.
- El apellido de André Schaeffner se escribe indistintamente como “Schaffner” y “Schaeffner” (¡cfr. la página 66, nota 182, donde se encuentran las dos variantes juntas!).
- En la página 83, se escribe “Iahvé”, cuando en español es “Yahvé” o “Jehová”.
- En la página 208, en el texto principal escribe “Christian Niemeyer” y en la nota 80 “C. Niemayer”.
Transliteraciones
- Белинский se translitera como “Bielinski” (págs. 28, 48 ó 75).
- Чернышевский se translitera como “Chernichevski” (págs. 48 y 234).
- Шестов se translitera como Chestov (págs. 3, 93, 97-100, 113, 122, 223 y 236). De manera correcta sólo en la página 117.
- Мышкин se translitera como “Mishkin” (págs. 68, 71-72, 78, 87, 103, 115, 132, 134, 195 y 235). En la página 115, nota 83, sin embargo, aparece como “Myshkin”.
- Тихон se translitera como “Tihon” (pág. 76).
- Tanto Gógol como Tolstói son citados indistintamente con o sin tilde en todo el texto, como sucede también con el personaje dostoievskiano Shatov.
- Verjovenski se translitera así en todo el texto, menos en la página 95, donde de repente se vuelve Verhovenski.
Otras curiosidades
- En la página 13 se presenta la estructura de la tesis y se afirma que para la “breve exposición de los estudios más importantes que han tratado el tema de la relación entre Nietzsche y Dostoievski […] hemos tomado como obra de referencia el atento estudio del filósofo italiano Sergio Givone dedicado a la recepción que las novelas dostoievskianas han tenido durante el siglo pasado en el ámbito filosófico”.
Es decir, que en lugar de investigar en las bibliotecas alemanas, rusas, inglesas, francesas e italianas, en las que el autor asegura haber estado, se ha dedicado a seguir las indicaciones de Sergio Givone (cfr. págs. 13 y 91). ¡Todo ello en el apartado que supuestamente es el más importante y novedoso de su tesis doctoral, puesto que, según sus propias palabras, a esta tarea “no ha sido dedicado ningún estudio” (pág. 13)!
- En la página 24 se afirma que Nietzsche adquirió la obra principal de Schopenhauer en “un anticuario de Leipzig en 1867”.
Si Nietzsche nació en 1844 y afirma en su carta del 23 de febrero de 1887 que descubrió a Schopenhauer cuando tenía 21 años, ¿cómo es posible que lo hiciera entonces en 1867?
- En la página 26 se afirma que La patrona es “una novela de juventud de 1847” (cfr. págs. 27-28, 124 y 143).
En los estudios dostoievskianos se distingue entre “roman” (роман) y “povest” (повесть), es decir, novela y novela breve o corta. La patrona es una povest.
- En la página 153 escribe: „Das, was Nietzsche von den Novellen Dostojewskijs am meisten interessierte, war sein Mut, alle Tiefen der Menschenseele zu zeigen, und diese Tiefe mit psychologischer Feinsinnigkeit zu beschreiben, wie die Novelle Aufzeichnungen aus dem Kellerloch “
Nietzsche no leyó “Novellen” (palabra alemana para designar “novelas breves o cortas”), sino “Novellen” y “Romane”, como, por ejemplo, Humillados y ofendidos o Los demonios.
- En las páginas 35-36 se habla de los primeros estudios que se dedicaron al “momento exacto del encuentro nietzscheano con Dostoievski” y se cita en la página siguiente como primera obra a Thomas Mann (sic!) para a continuación mencionar a Ernst Benz (sic!), a Wolfgang Gesemann y a C. A. Miller.
La ignorancia que demuestra no sólo aquí, sino en toda la tesis en lo que él mismo denomina de forma pedante “Nietzsche-Dostojewskij Rezeption” es de un atrevimiento tal, que raya el insulto. ¿Qué pasa, por ejemplo, con el clásico estudio de Charles Andler?
- En la página 36: “De todos modos, en las siguientes líneas dedicaremos un breve análisis a las hipótesis más persuasivas que han sido avanzadas por los especialistas durante los años.”
Es decir, el “método riguroso” no se define por el carácter de fundamentación científica, en este caso, documental, que tengan las afirmaciones realizadas por los distintos especialistas, sino por la persuasión.
- En la página 38 se dice: “Esta obra [se trata de La roman russe de De Vogüé], que no pretende ser una historia de la literatura rusa, sino únicamente ofrecer una imagen de los escritores rusos más destacados, tuvo una resonancia enorme en Francia y desencadenó aquella boga de la literatura rusa que constituye el trasfondo del descubrimiento nietzscheano de Dostoievski.” Cfr. también pág. 60.
Nietzsche conoció a Dostoievski independientemente de esta “resonancia enorme en Francia”. Su descubrimiento fue “casual” en una librería de Niza, no inducida por ninguna moda literaria del momento. Su muestra de sorpresa ante su descubrimiento así lo testimonia.
- A Georg Brandes, se le califica de “profesor danés” (pág. 57), de “crítico literario danés” (pág. 86) y de “docente de belles lettres en la Universidad de Copenhague” (pág. 92).
Georg Brandes fue un crítico literario y filósofo danés, lector en la Universidad de Copenhague. Mas nunca “profesor” o “docente de belles lettres”.
- En la página 58, se cita la carta que Nietzsche le envía a August Strindberg, en la que el filósofo descalifica la labor de un “traductor alemán” y se sostiene que Nietzsche estaría haciendo referencia a Goldschmidt, el traductor de las Erzählungen editadas en Reclam.
Con esta interpretación, el autor ignora no sólo lo que se dice en el Nachbericht a esta carta en la edición crítica (KGB III.7/3.1, pág. 457), sino también lo afirmado por el primer editor del epistolario entre Nietzsche y Strindberg.
- Cuando se trata la cuestión de Crimen y castigo, se cita como prueba de que Nietzsche conocería este texto la obra de C. Bleibtreu que le “envió” su amigo Overbeck (pág. 61). Aquí son varias las cuestiones a señalar:
- “Karl Bleibtreu” no fue el “redactor” de Magazin für die Litteratur des In- und Auslandes, sino el “Herausgeber”, es decir, el editor.
- Overbeck no le “envía” ninguna obra a Nietzsche, sino que se la da en persona cuando se encuentran en Zúrich el 30 de abril de 1887.
- Nietzsche no lee el prólogo de la tercera edición (pág. 62) de la obra de Carl Bleibtreu Revolution der Literatur, sino de la segunda. Para más detalles sobre esta cuestión, remitimos al lector a Bases filológicas para una comparación entre F.M. Dostoievski y F. Nietzsche.
- En las conclusiones acerca de si Nietzsche leyó o no Crimen y castigo en traducción francesa, se afirma: “Por nuestra parte, nos limitamos a señalar estas dudas y a concluir que, si bien la lectura de Crimen y castigo por parte de Nietzsche no sólo es plausible, sino muy probable, ésta desafortunadamente no puede ser demostrada, sino sólo sugerida” (pág. 66).
De nuevo: sugerencias y plausibilidades. La misma metodología se observa cuando habla de El idiota (pág. 73) o de Los hermanos Karamázov (pág. 192). Como resumen, véase la página 235.
- En la página 75 escribe: “Cabe entonces avanzar la hipótesis de que Nietzsche leyera la obra de Dostoievski [se refiere a Los demonios] en Niza, en los últimos meses de 1887 o en los primeros de 1888.”
Es poco científico hablar de hipótesis cuando el propio Nietzsche copió algunos textos de esta obra que se encuentran fechados en esta época. Véase Bases filológicas para una comparación entre F.M. Dostoievski y F. Nietzsche.
- En las páginas 78-79, sin haber probado la lectura por parte de Nietzsche de la novela El idiota, se afirma “completando” a Miller: “Siguiendo así la sugerencia de Miller, nos damos cuenta de cómo en la caracterización nietzscheana del nazareno convergen tanto la figura del príncipe Mishkin de El idiota, como la de Kirílov con su idea de la eterna armonía”.
Para más detalles, remitimos a nuestro artículo Der ‘Idiot’ bei F. M. Dostoevskij und F. Nietzsche. Geschichte eines Irrtums.
- La tesis expuesta en las páginas 89-90, según la cual el nombre de Dostoievski no aparece en el Ecce homo porque “la madre y la hermana de Nietzsche censuraron y destruyeron algunos pasajes que consideraron inapropiados” es cuanto menos delirante, además de una suposición sin fundamento alguno y fruto del “dudoso y novelesco testimonio” (pág. 90) no de Elisabeth, sino del autor de esta tesis.
- Tras sostener que los estudios comparativos en Rusia “que más influencia han tenido” (pág. 93) empiezan con Merezhkovski, Chestov (sic!) y Berdiaev (al parecer Soloviev no escribió ningún texto dedicado a la cuestión) y de realizar unas exposiciones más que dudosas de sus obras, califica a El Gran Inquisidor de “leyenda” (pág. 133) y de “el cuento de Iván Karamázov” (pág. 102).
- En la página 93 se afirma: “ Tolstoi y Dostoievski de Dmitri Merezhkovski, estudio publicado en 1901-1902 en la revista Mir iskusstva (El mundo del arte)”.
Esta obra se publicó con el título L. Tolstoi i Dostoievski en la revista Mir iskusstva durante los años 1900-1902. ¿Tampoco pudo comprobar este dato en la Biblioteca de San Petersburgo?
- Página 109: “Nietzsche muestra indirectamente al autor ruso su pesimismo y moralismo, mientras que Dostoievski a su vez desvela como [sic!] detrás de la muerte de Dios nietzscheana se esconde un miedo sublimado de Dios”.
Es decir, ¿Dios tenía un miedo sublimado?
- Página 109: “Con este encuentro final, que es a la vez una separación, se [sic!] concluye el estudio de Balthasar, un estudio cuya lectura resulta para el lego muy ardua y complicada.”
Gracias, doctor europeo, por hacernos a nosotros, pobres legos, un resumen de esta obra.
- Página 118: “Arthur Möller van den Bruck (traductor de Dostoievski al alemán)”.
Arthur Möller van den Bruck fue el editor, junto con D. Merezhkovski, de la edición de las obras completas de Dostoievski traducidas por E. K. Rahsin en Piper Verlag.
- En las páginas 123 y 146 se califica a los estudios de C. A. Miller publicados en los Nietzsche-Studien de “ensayos”.
Hay que tener una ignorancia muy atrevida para calificar de “ensayos” a los tres artículos fundamentales de C. A. Miller, que inauguraron una nueva etapa en los estudios sobre Nietzsche y Dostoievski.
- Página 154, nota 31: El autor se equivoca de destinatario: no es “An Ernst Wilhelm Fritzsch”, sino “An Franz Overbeck“.
- En las páginas 165 a la 184, se intenta justificar y probar el hecho de que Nietzsche utiliza y trata “con gran anhelo” (pág. 176) la cuestión del resentimiento en 1888, gracias a la influencia de la lectura de L’esprit souterrain de Dostoievski. No vamos a entrar a rebatir esta descabellada idea, tarea ya realizada en otro lugar. Aquí sólo agregaremos lo siguiente:
En la transcripción de la “Druckfassung” de la Genealogía de la moral comete un error: No es “Dostojewskij” (pág. 177), sino “Dostoijewsky”.
- En la página 197 escribe: “En su conocido estudio sobre Dostoievski, Mijaíl Bajtín, el gran crítico y teórico de la literatura rusa, pone de manifiesto cómo en las grandes novelas de Dostoievski «la idea […] llega a ser protagonista de la obra».”
En primer lugar, Bajtín es un filósofo y, en segundo, la primera persona en señalar esta peculiaridad de la obra de Dostoievski fue V. M. Engelhardt: «Ideologicheskij roman Dostoievskogo».
- En la página 207, nota 77, se da erróneamente la referencia a Ovidio. No “Ovidio, Amores, IV 17”, sino Ovidio, Amores, III, 4, 17. Imperdonable error para un italiano.
- En la página 209, hablando de La genealogía de la moral, se dice “En el párrafo 24”. Las obras de Nietzsche no se dividen en “párrafos”, sino en “apartados”. ¿Desconoce el autor la diferencia entre “párrafo” y “apartado”?
- En la página 224 se nombra a Givone y a de Lubac como los primeros en sostener que la obra de Dostoievski constituiría “una crítica ante litteram de la filosofía del pensador alemán”.
Completamente falso. Sea citado únicamente como prueba Smirnov, Dostoievski i Nietzsche. Publichnaja lekzia, Kazán, 1903.
- En la página 225: “En este sentido, no se trata aquí de negar o de ocultar los aspectos más terribles y peligrosos de la filosofía nietzscheana, como si estos no existieran, sino más bien de rescatar los rasgos más positivos de ella frente a lecturas que la empobrecen o la demonizan.”
Después de llevar leídas 225 páginas, uno se pregunta si esto no es más bien un comentario crítico a toda su “labor investigadora” llevada a cabo hasta el momento.
- Los apartados “III.1 ¿Kirílov como superhombre?” (págs. 225-229) y “III.2. ¿Iván como precursor de Nietzsche?” (págs. 229-232) no sólo son confusos, sino que quedarán en la historia de la investigación nietzscheana como ejemplo paradigmático de lo que sucede cuando se desconoce la bibliografía secundaria rusa sobre el tema. Sea citado a título de ejemplo: Verner, «Tip Kirillova u Dostoevskogo», Novy put (1903), núm. 10, págs. 48-80; núm. 11, págs. 52-80 y núm. 12, págs. 128-182.
- En las cartas de Heinrich Köselitz a Nietzsche del 20 de febrero de 1887 (pág. 23) y de Nietzsche a Overbeck (pág. 24) no se respetan las cursivas.
- En la carta del 23 de febrero de 1887 de Nietzsche, se traduce “Buchladen” como “tienda de libros” (págs. 23, 24 y 88) y “librería” (págs. 25, 26 y 42).
- “Geniestreich der Psychologie” se traduce como “alarde de genialidad de psicología” (pág. 24) y en la página siguiente como “golpe de genio de la psicología”.
- En el fragmento póstumo 14 [155] citado en las páginas 52-53 se traduce ungebrochene Naturen como “naturalezas íntegras” y ‘gebrochener’ Christ como “cristiano ‘hecho pedazos’”, perdiéndose así el juego de palabras que Nietzsche realiza. En la página 117 traduce por “quebrantado cristiano”.
- En lugar de “en su carta o en su libro” (pág. 86), léase “en su carta y en su libro”.
- En la página 162, nota 63, en lugar de “Breslauer”, léase “Breslau”.
- La palabra rusa Эпоха en alemán en lugar de “Epoha” (pág. 145), léase Epocha o, si se quiere, Epokha.
- En la página 161, nota 56, léase en alemán no “Alcibiades”, sino “Alkibiades”.
- En lugar de „GeistigGedrückten” (pág. 164), léase “Geistig-Gedrückten”.
- En la página 199 traduce “para los verdaderos rusos” como “настоящим русские”. En todo caso, habría que escribir “настоящим русским”.
- En lugar de “en las Nietzsche-Studien” (págs. 25, 36, 123, 139, 140 y 236), léase “en los Nietzsche-Studien”.
- En lugar de “las Vorstufe” (págs. 43 y 44), léase “los Vorstufe”.
Si el amable lector ha tenido la paciencia de llegar hasta aquí, habrá podido comprobar cuál es el resultado de aplicar una metodología “precisa y rigurosa” (pág. 233), que “se sujeta [sic!] sobre fundamentos sólidos” (ibid.) y que tiene “cuidado al leer y comparar los textos” (pág. 237): un fraude intelectual y un timo académico avalado por la comunidad nietzscheana española.
Esta chapuza intelectual, que constituye un grave insulto hacia todos los que se dedican en serio a esta temática, no sólo ofrece “una interpretación equivocada o restrictiva de la filosofía nietzscheana” (pág. 238) y dostoievskiana, sino también justifica y desarrolla tesis erróneas, siendo lo más grave de todo que pretende presentar respuestas novedosas y definitivas a cuestiones que ya llevan mucho tiempo solucionadas en la investigación internacional en torno a Nietzsche y Dostoievski.
No obstante, lo que sí se le ha de reconocer al autor es el hecho de que revela, consciente o inconscientemente, sus fuentes. Toda su “investigación” está basada, no en la abundante bibliografía rusa y occidental sobre el tema, sino en Pacini, Giovani y en el artículo (que el doctor europeo denomina “ensayo”) de Renate Müller-Buck, por no citar ya a sus mecenas Volker Gerhardt, Jesús Conill, J. B. Llinares o a los genios de la “escuela de Greifswald”, empezando por Werner Stegmaier y acabando por Silvio Pfeuffer o Ekaterina Poljakova.
Esta forma despreciativa, “restrictiva”, como diría en este contexto nuestro autor, con la que trata las figuras históricas de Dostoievski y Nietzsche, ¿es reflejo del “camino de la investigación” mostrado por sus directores de tesis o del “conocimiento profundo de la materia” de los especialistas por él citados? ¿Es el resultado de su estancia en Alemania y la “metodología de trabajo y la profundidad de análisis” allí aprendida o de sus avances en el estudio “con rigor y profundidad” de la filosofía nietzscheana? ¿O es su forma de expresar la “honestidad intelectual” a la que hace referencia en la página 8?
No extraña, ni sorprende ni tampoco es casualidad que este “doctor europeo” sea invitado por el “Seminario para la investigación y difusión del pensamiento nietzscheano” de la Universidad Complutense de Madrid, cuna de Podemos, para dar conferencias o que pase en determinados círculos como “especialista en Nietzsche y Dostoievski”. Similis simili gaudet, por lo que mientras se sigan promocionando y permitiendo que tales fraudes y timadores intelectuales vivan del dinero de los sufridos contribuyentes españoles (no olvidemos que esta “investigación” ha sido financiada, en parte, con una beca de Formación de Profesorado Universitario del Ministerio de Educación), el mundo universitario español está condenado a ser únicamente un nido de sinvergüenzas y corruptos que se aprovechan de la ignorancia que ellos mismos procuran con tanto esfuerzo fomentar y promover entre las nuevas generaciones españolas.
Jordi Morillas
[1] Véase por ejemplo http://www.elconfidencial.com/alma-corazon-vida/2011-04-27/mi-pesadilla-empezo-cuando-obtuve-la-plaza-destinada-al-amigo-del-rector_242864/
[2] La tesis se puede consultar en el siguiente enlace: https://www.educacion.gob.es/teseo/mostrarRef.do?ref=886680